23 oct 2013

NUBES

Hace dos semanas enviamos varios nanorrelatos al Cuenta 140 de El Cultural del periódico El Mundo. Aprovecho para copiar los comentarios del jurado Juan Aparicio Belmonte, sobre algunos de ellos, (destacados y en letra cursiva) Es una buena forma de anotar fallos y reírse de uno mismo. Esto ayuda a mejorar. A continuación los "nanos":
#43 El pintor callejero llenaba de nimbos sus lienzos, bajo un sol radiante.
El día que murió, comenzó a llover.
Y el diluvio continúa.

#53 Unos osos… Ahora se gritan… El águila persigue a la rana… Papá, la ha cogido del pelo… Las nubes desaparecen… Mamá no dice nada, papá corre.
Llegado a este punto no me queda más que emular a don José Ortega y Gasset, y decir aquí y ahora: No es esto, amigos, no es esto. Este humilde juez propuso el advenimiento de las nubes con su decisión procesal y con lo que es más eficaz aún, con su esperanza, y se dice ahora entre desasosegado y descontento: No es esto, amigos, no es esto. Cuentos incomprensibles (hay tantos): como el 53, (Juan Aparicio Belmonte)

#213 Varias noches después, las nubes se disiparon. Los tres reyes en sus camellos, pusieron rumbo hacia la estrella fugaz que no cesaba de caer.

#324 Bólidos, barcos, guerreros y dragones. Los juguetes flotaban en las nubes, hasta que don Pedro nos encontraba y volvíamos al reformatorio.

#352 Me acerqué a ella tímido, como un cirro. Nos enamoramos poco a poco, por estratos. Fuimos nimbos ardorosos. Y como cúmulos, nos separamos.
Rayos y truenos, no sabía que los cirros fueran tímidos. Ni que los nimbos ardorosos. 
¿Para cuándo celajes codiciosos? (Juan Aparicio Belmonte)

Pablo Vázquez Pérez
Se acabaron estas nubes... Foto de Pablo Vázquez

21 oct 2013

UN BLOG ARTESANO

Nadie me ha preguntado hasta hoy porqué tenemos este subtítulo debajo del título principal "Un blog artesano". La respuesta es solo que por humor, por pura broma. Nada de lo que hacemos aquí resulta artesano, tal como lo podríamos entender hasta finales del siglo XX. Pero incluso al revisar la definición académica de la RAE, Sin Bulla entraría en una categoría casi artesanal por usar métodos mecánicos. Mi manera de escribir o componer estos artículos, responde a un trabajo de copiar y pegar textos que ya suelo tener escritos previamente. O son textos, relatos, microrrelatos y poemas que envié a concursos o publiqué en otras páginas y revistas. Además muchos los programo para una fecha y hora determinados de antemano.
Esta entrada en concreto, es de las pocas que elaboro y publico en directo, sin "corta y pega". Ojalá alguien aguante hasta las últimas líneas, aunque comprendo que este espacio no tiene mayor importancia que la que yo pueda encontrar.
Sigo pensando que este blog tiene que ser de nuevo una bitácora, pero claro, eso significa empezar a "contar batallitas" y bueno, los lectores se cansan y merecen el mayor de mis respetos, ya que se molestan en asomarse por aquí y seguirnos. Es curioso, suelo referirme en primera persona del plural, como si este blog lo escribiéramos varios autores, cuando suelo ser yo el único que lo hace. Sin embargo, sí he publicado varios haikus o poemas cortos, escritos por otras personas, tal como se puede leer en la categoría de Colaboraciones (pulsando el enlace)
Tengo pendientes por publicar algunas intervenciones conjuntas o, para decirlo de una forma más coyuntural, algunas sinergias creativas entre otras páginas y autores que conocemos. Como veis vuelvo al plural y la razón es porque este blog lo escribimos tanto yo, como los que leéis y comentáis. O simplemente os asomáis. Empiezo a pecar de sensiblero y a usar lugares comunes, así que abreviaré.
Como podéis comprobar, he divagado más de la cuenta, con alevosía, por lo cual no me extiendo en más párrafos. Se habla en las redes y foros del fin de los blogs. Que se acaban y las redes sociales y el WASSAP se llevan todo el interés. Sí, los blogs perecen, aunque este sigue. Ojalá os guste la nueva cabecera. Animaos a visitar otras páginas que están enlazadas en la columna derecha porque merecen la pena. Y os agradezco muchísimo a todas y todos los comentarios que me habéis enviado todo este tiempo y he ido contestando, espero que todos. Sonará otra vez a tópico, pero cualquier comentario es bueno, sea crítico o adulador, de verdad.
Pablo Vázquez Pérez

Una cabecera antigua