El comandante de la Guardia Suiza nunca
llegó a cruzar el umbral y se quedó apoyado en el quicio de la puerta, tal como
pude ver al contraluz desde mi cama.
- No
serán necesarias más bajas, Eminencia Reverendísima. Dentro de poco habrá
fumata blanca.
Su castellano resultó ser básico,
aunque efectivo, al dirigirse a mí. A pesar del peto metálico que cubría el
incómodo uniforme, el comandante mantuvo un ritmo firme y rápido al alejarse,
dejando un reguero de sangre proveniente de la espada que portaba a su cintura.
El olor putrefacto del cuerpo
inerte de su Santidad, en las dependencias próximas, no fue capaz de distraerme
cuando mi mente comenzó a trabajar en futuras encíclicas.
Microrrelato colgado en este enlace junto con cientos más, para el concurso de microrrelatos del certamen Getafe Negro del año 2011. La frase propuesta para comenzar fue:
El comandante de la Guardia Suiza nunca
llegó a cruzar el umbral.
Enlace para leer los microrrelatos presentados:
Pues me quedo con la duda de si es suyo o de otro autor, Don Pablo.
ResponderEliminarAhora que ya lo tengo localizado y que veo que cuelga Ud. micros habitualmente, me verá por aquí con toda la frecuencia que me sea posible.
Un abrazo,
Hola Pedro. Pues yo ya soy má so menos asiduo a Entre nunca y quién sabe, así qu enos leeremos a menudo.
ResponderEliminarEl micro sí lo escribí yo (y tres más) para ese concurso, que debía empezar con la frase inicial, aunque quizás es un poco farragoso ahora al releerlo. Un abrazo.
Pablo, es la primera vez que entro en tu blog y me gusta. Enhorabuena. Por cierto hace mucho que no te vemos el pelo por Relatopía. Un abrazo.
ResponderEliminarTomás.
Hola Pablo, es la primera vez que entro en tu blog y me gusta. Enhorabuena.Por cierto hace tiempo que no te vemos por Relatopía, anímate que queda poquito.Un abrazo, Tomás.
ResponderEliminarComo soy nuevo he duplicado el mensaje espero que sepas disculparme. Tomás.
ResponderEliminarHola Tomás.
ResponderEliminarMás contento estoy yo que tú de leer tu comentario. Me alegra mucho que leas el blog y por supuesto, si tiene uno propio, dímelo. En relatopía ya lo he visto.
Y nos vemos mañana, por supuesto. Un abrazo.